Solemos penar que las duchas están hechas exclusivamente para colocarlas en el interior de nuestro hogar. Parece razonable, normalmente solemos ducharnos en la intimidad de 4 paredes. No obstante, esa moda de colocar duchas en el exterior nos gusta. Y es que no somos conscientes de lo funcionales que pueden ser estos elementos en el exterior, además de poder crear rincones realmente agradables.
¿Por qué no ducharse en el jardín? Rodeados de plantas y vegetación, aunque sólo sea para darnos un refrescante chapuzón vestidos con nuestros trajes de baño. Además, si estamos trabajando en nuestras plantas, cortando el césped o incluso tomando el sol, puede ser un elemento imprescindible que nos ayudará a entrar completamente limpios en nuestra casa. Sin hablar de que podrían ser el cuarto de baño perfecto para que nuestras mascotas pudieran disfrutar de un buen baño estival.
No estamos inventando nada, las duchas exteriores existen, aunque normalmente se limitan a esas que se colocan junto a las piscinas. Con un diseño bastante sencillo, todo sea dicho.
No. Hoy no os traemos esas viejas duchas de piscina. Se trata de propuestas bastante coloridas, con miles de materiales, combinaciones arriesgadas con azulejos y plantas. Duchas cerradas o abiertas. Grandes duchas con forma de cascada o hilitos de agua sutiles que caerán sobre nosotros en los días calurosos del verano.
Aunque evidentemente el diseño dependerá de nuestros gustos, os mostramos algunos ejemplos que a nosotros nos han encantado. Intentad ser imaginativos e inspiraos en esta pequeña muestra. Eso sí, hay algo muy importante a tener en cuenta. Las duchas deben colocarse en una superficie que no resbale. No es necesario poner un plato de ducha si no queremos, pero intentar escoger azulejos que no sean demasiado resbaladizos, pues nos interesa evitar cualquier accidente.
Fotos vía: media-cache-ec4.pinimg, dreamforreverr.tumblr, bculik, unlugarparalossentidos